Hacía tiempo que no escribía en mi blog, pero la excursión de hoy bien merece que la comparta con vosotros.
¿Habéis oído hablar del Atlantis? Lo cierto es que yo sí, casi al principio de llegar a la isla y el lunes que viene va a hacer ya tres años, hoy no es momento de decir eso de como pasa el tiempo, pues bien, hoy he tenido el placer de conocer este mágico lugar.
Ubicado donde estaba la antigua Pedrera de Ibiza, cerca de Cala d'Hort, hay un acantilado que se baja con cierta facilidad y acaba en un lugar rocoso con aguas cristalinas, donde el baño es obligado y la paz es absoluta, no esperéis ninguna llamada al móvil porque no hay ni cobertura, vamos ideal. La subida, no os voy a engañar, la subida es dura, no quiero decir peligrosa sino exigente por el desnivel, así que guardaros un traguito de agua porque lo vais a necesitar.
He de admitir que en esta primera visita he cometido algún error que os aseguro que no volveré a cometer y que espero que leyendo este post tampoco os pase a vosotros. No me he llevado las gafas de buceo y con la cantidad de peces que se veían es una lástima, zapatillas náuticas para evitar los erizos de mar y un avituallamiento en condiciones, el fuet y el melón de hoy ha estado bien, pero me faltaba las cervecitas, olivitas... bueno, ya me conocéis.
Pues eso, ya tengo otro de esos rincones a recomendar en Ibiza.
